Al realizar estudios biomecánicos observamos si existe alguna alteración en articulaciones relacionadas (caderas, rodillas, pies…) de esa persona que pueda repercutir en la marcha, pudiendo generar una alteración biomecánica y por lo tanto un problema presente o futuro.
Nuestros pies reciben el impacto, las presiones y adaptaciones a todo tipo de terreno.
Por lo tanto si todo esto es importante para cualquier persona con o sin problemas biomecánicos, aún lo es más para aquellos que practican deporte ya que los movimientos repetitivos de la práctica deportiva puede conllevar a una lesión.